La terapia con animales o zooterapia es aquella en la que se utiliza la compañía de un animal para beneficiar la salud física y emocional de una persona. Su finalidad es tratar problemas mediante el afecto y la responsabilidad que conlleva relacionarse con un animal. Este método empezó a utilizarse en Inglaterra en 1972, con los enfermos mentales.
Se conocen numerosos casos con perros, gatos, delfines, caballos, tortugas... Normalmente se utilizan animales que obedecen órdenes fácilmente y que pueden llegar a tener alguna habilidad especial tras ser entrenados, también se tiene en cuenta la simpatía que pueda tener el paciente hacia alguna especie en particular.
En el caso de los niños, se ha comprobado su eficacia en el tratamiento (que no cura) de algunas discapacidades en el habla, enfermedades degenerativas, trastornos de la personalidad, dificultades sociales, etc. Los animales preparados para tal fin envían mensajes positivos que ayudan al niño a relajarse y a sentirse querido. Además, al ayudar psíquicamente al paciente, las habilidades corporales también pueden mejorar.
Los animales son un recurso muy útil a la hora de ayudar a las personas, ya que no etiquetan ni juzgan a nadie y permiten que el niño se olvide por un momento de sus problemas.
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